lunes, 18 de julio de 2011

El autoerotismo


El autoerotismo incluye la autoestimulación y la masturbación. La masturbación se focaliza fundamentalmente en los genitales y hablar del autoerotismo por un lado amplía las posibilidades de la experiencia placentera con uno mismo y por el otro lado, evita las connotaciones peyorativas acerca de la masturbación. El autoerotismo incluye las caricias, la masturbación, y también la estimulación de los sentidos, de la imaginación y de las emociones propias.
Es una excelente forma de conocernos a nosotros mismos, de obtener placer y de aumentar nuestra autoestima. Su práctica en ciertas condiciones, ayuda a mejorar nuestro desempeño sexual, facilitando el orgasmo o su control, además de estimular el deseo sexual al mantenernos estimulados y satisfechos.

A pesar de los beneficios que se conocen actualmente para las prácticas autoeróticas, la masturbación ha sido considerada como una conducta impropia, que debe extinguirse en el mejor de los casos. Entre los grandes mitos en torno a la masturbación, se creía que estaba relacionada con la enfermedad mental y la degeneración mental. Los médicos del siglo XIX recomendaban castigar cualquier conducta masturbatoria de los menores incluso recurriendo a aparatos diseñados para que la erección fuera dolorosa.
Fue la investigación de Kinsey la que puso fin a dicho mito, al revelar que la mayoría de las personas se masturba o se ha masturbado en algún momento de su vida sin que por ello se asocie una enfermedad mental o padecimiento alguno.
De los grandes temores que tenemos con respecto a la masturbación es que se convierta en una obsesión que no pueda detenerse, que el deseo se vuelva incontrolable. También nos asusta que después podamos preferir la masturbación a la estimulación en pareja.
Ambos son temores infundados dado que el deseo sexual por lo general se regula con las actividades cotidianas de manera que una persona sana difícilmente puede tener una compulsión por masturbarse. Por otro lado, la satisfacción y estimulación que se reciben al estar en una relación sexual con una pareja incluye una gran cantidad de elementos que no se presentan en el autoerotismo, son actividades fundamentalmente diferentes que no pueden ser una el reemplazo de la otra. Es decir que nunca la relación sexual reemplazará al autoerotismo, lo mismo que el autoerotismo no es una práctica que sustituya la relación sexual.
En pocos casos, puede llegar a presentarse una conducta masturbatoria compulsiva. Cabe mencionar que la masturbación, en esos casos, es un síntoma y no el origen de un trastorno, de la misma manera que una compulsión por lavarse las manos es un síntoma y de ninguna manera el origen del trastorno. Estos casos deben atenderse por un sexólogo clínico o un psiquiatra.
Otro gran mito de la masturbación es que representa un rechazo para la pareja, que si una persona tiene una pareja sexual, no debe masturbarse pues tiene con quien satisfacer sus necesidades sexuales. Esta idea me parece en lo personal cargada de violencia hacia la pareja, quien no es un objeto de satisfacción de necesidades sexuales. Cuando se tiene una pareja sexual, se comparte el deseo sexual, las “necesidades” y la satisfacción es mutua. El autoerotismo no depende de la disponibilidad de una pareja sexual, depende de las posibilidades de amarse uno mismo y de acariciarse de maneras que son muy personales, involucrando además un sinfín de estímulos desde la imaginación, sin presiones por “cumplir” o tener un buen desempeño. Son experiencias paralelas que no se contraponen.
El autoerotismo tiene grandes beneficios tanto en lo individual como para la pareja. Es una excelente fuente de autoconocimiento, una persona que se conoce sexualmente será un mejor amante pues podrá dirigir las caricias para aumentar su placer. También se sentirá más confiada para explorar a su pareja y para recibir direcciones que satisfagan mejor a su pareja.
Otro beneficio del autoerotismo es el aumento de la autoestima del practicante. Una persona que se conoce y se procura experiencias de placer sexual, se encuentra más satisfecha con la vida y consigo misma. Una persona que se procura experiencias de placer sexual, puede procurarse experiencias placenteras en general y sabe que merece estar bien y sentirse bien.
Una persona que se conoce y se procura placer, puede interesarse en mejorar su desempeño sexual, aprendiendo a controlar la eyaculación o a estimular el orgasmo.
Además de estos beneficios, el autoerotismo es una alternativa a las relaciones sexuales coitales que presentan riesgos de embarazos no deseados y /o contagio de infecciones de transmisión sexual. En el caso de los adolescentes, pueden aprender a conocerse, experimentar el placer y la respuesta sexual sin restricciones (deseo, excitación y orgasmo), al tiempo que evitan los riesgos mencionados, pueden saciar su curiosidad.
En el caso de la masturbación, puede practicarse en pareja con los beneficios de evitar los riesgos, mejorar la comunicación y conocimiento de la pareja, como alternativa al coito.

sábado, 9 de julio de 2011

SALUD Y SEXUALIDAD


En Inglaterra se realizaron 2 investigaciones largo plazo, se dio seguimiento a más de 900 hombres de entre 45 a 59 años durante 20 años relacionando la frecuencia de relaciones sexuales coitales así como la frecuencia de orgasmos y la salud. Estos revelan que la satisfacción sexual es un elemento esencial para la buena salud de las personas y para alargar la vida. (S. Ebrahim et al.: «Sexual intercourse and risk of ischaemic stroke and coronary heart disease: the Caerphilly study», J Epidemiol Community Health, no. 56, 2002, pp. 99-102) y (G. Davey Smith, S. Frankel y J. Yarnell: «Sex and death: are they related? Findings from the Caerphilly cohort study», BMJ, no. 315, 1997, pp. 1 641-1 644)
En efecto, los hombres que tienen actividad sexual satisfactoria con una frecuencia de al menos una vez a la semana, tienen menor probabilidad de tener alguna enfermedad cardiológica y del sistema de circulación o de tener un infarto e incluso de morir.
Por el otro lado, la salud general tiene un gran impacto sobre la calidad de la vida sexual. Enfermedades crónicas englobadas recientemente como síndrome metabólico, esto es, sobrepeso y obesidad, hipertensión arterial, hipercolesterolemia (colesterol alto) y diabetes se relacionan con la disfunción eréctil. Otras enfermedades como la depresión, alteraciones del sistema nervioso (por lesiones, tumores u otras causas) y del sistema hormonal, así como algunos medicamentos también impactan en la función sexual.
Así vemos que el placer sexual es esencial para la salud y la calidad de vida y la salud es esencial para el buen funcionamiento sexual. Parece enredado, lo cierto es que en la medida que cuidemos la calidad de nuestra vida en general, viviremos más y mejor.
¿Cómo? Nos lo repiten hasta el cansancio:
• Llevar una vida tranquila, procurando el placer y la satisfacción en lo que hacemos y decidimos,
• Llevar una alimentación sana (con muchas verduras y frutas, una cantidad adecuada de proteínas animales, de preferencia pollo y pescados, algunos granos –frijol, lentejas, habas, etc.- pocas harinas y muy poca grasa de preferencia de origen vegetal),
• Hacer ejercicio (cardiovascular –caminar, correr, nadar, aeróbics etc.) al menos 30 minutos diarios
• Cuidar el cuerpo y revisarlo constantemente, acudir a revisiones periódicas
• Valorar el propio cuerpo, conocerlo y sentirse atractivo-a con él, saber que es el templo de las sensaciones.
• Mantener la mente activa
• Ejercitar el corazón y las emociones, amar y cuidar de los seres amados. La comunicación clara y efectiva con la pareja es esencial para tener una buena relación de pareja que sea satisfactoria y procure el placer sexual para ambos
• Conocerse uno mismo y autoestimularse incluyendo la masturbación
• Divertirse, la risa y el placer en su sentido más amplio son importantes para la calidad de vida, reducir el estrés, para el disfrute y para la satisfacción sexual
• Buscar espacios eróticos, el placer sexual debe buscarse activamente y no esperar a que suceda cuando haya tiempo.
• Buscar ayuda terapéutica o médica cuando es necesario